¡Libros que Salen! Hazelwood, «Cuerpos para odiar», Jackson con ilustraciones de Segovia y más

¡Que entre la pila!

Novia de Ali Hazelwood, ed. Faeris

Ella es la única hija del más poderoso consejero vampírico, él es el jefe de una manada de hombres lobo, ¿podría hacerlo más obvio? A ella se le ha acabado el anonimato entre los humanos, él busca gobernar con compasión, ¿qué más puedo decir? A partir de aquí un matrimonio de conveniencia en el que él no se fía de ella y ella… bueno, tiene sus propios motivos para este matrimonio de conveniencia. El resto, con humor y -en este caso- con fantasía, es parte de la nueva novela de Ali Hazelwood.

Cuentos oscuros de Shirley Jackson con ilustraciones de Carmen Segovia, ed. Libros del Zorro Rojo y Minúscula

Bienvenidas sean las novedades de Shirley Jackson incluso aunque se trate de obras como esta, que busca más la ilustración que el texto. Espero que sepamos pronto cuáles y cuántos relatos trae en sus 200 páginas, pero habrá que echarle un ojo al menos.

Cuerpos para odiar de Claudia Rodríguez, ed. Barrett

Un texto duro pero narrado desde el conocimiento. Claudia Rodríguez es una mujer trans chilena que ha militado en todo tipo de movimientos, ha realizado estudios sobre distintos temas, se ha formado en trabajo social y ha formado parte de una compañía teatral. Todo esto le ha ayudado para componer estas historias, hasta ahora autoeditadas en fanzines, en las que habla de la sordidez de la calle, la brutalidad policial, el hambre o el rechazo social. Y lo hace enfrentándose a todo, incluyendo las convenciones ortográficas. Y ofreciendo una obra en la que la mezcla del habla oral o la honestidad en el retrato no rehúye la agudeza o el humor.

McGlue de Ottessa Moshfegh, ed. Alfaguara

La primera novela de Ottessa Moshfegh, una obra sobre la memoria, en la que un marinero de mediados del S XIX despierta atado y sin recordar nada. Aparentemente culpable del asesinato de un compañero. Solo que no recuerda nada de haberlo hecho y, además, le caía bien. Pero, claro, su historial con el alcohol y la violencia -por no mencionar un feo golpe en la cabeza- hace que no pueda estar seguro. Una obra aún inicial, pero que ya va mostrándonos por dónde va a ir discurriendo el asunto.

Saltonautas de Hao Jingfang, ed. Nova

¡Milagro de los milagros! Nova publicando a una mujer, algo que llevaba sin pasar desde 2022. Pero bueno, habían publicado su anterior novela en 2020 y supongo que alguien pensó que ya iba tocando sacar el siguiente. Un thriller de ciencia ficción en un mundo futuro, con solo dos bandos repartiéndose la Tierra, la reaparición de un tercero y la inesperada llegada de una raza alienígena. Que hace que todos quieran ser los primeros en hablar con ellos, pero también que no sepan qué tipo de seres -o con qué intenciones- van a encontrarse.

Perros de Gendry-Kim Keum Suk, ed. Reservoir Books

La bien conocida autora de Hierbay La Espera se centra ahora en los Perros, un tema complejo en Corea del Sur, en el que -bien sea como comida o como mascota- se crían en demasiadas ocasiones sin normas, con violencia y maltratos. Lo hace usando a una joven esposa que decide adoptar un perro -y no será el último- mientras observa toda esta complicada circunstancia.

Nawashi. El maestro de la cuerda de Fuminori Nakamura, ed. Quaterni

Quizá recordéis que hace poco más de una década Quaterni publicó el thriller El Ladrón de Fuminori Nakamura; al año siguiente, pero en Satori, le publicaron la más literaria En una noche de melancolía. Y no habíamos vuelto a saber de él… hasta ahora. Con un nuevo thriller con mujeres casi idénticas, detectives poco parecidos y, en el centro, el kinbaku, una forma de atadura con cuerdas que puede ir de lo espiritual a lo erótico, con un maestro de este arte apareciendo muerto de manera misteriosa. Así que aquí tenemos una posibilidad de reconectar o, bueno, saber más de él.

El último ramo de flores y otras historias de Marjorie Bowen, ed. La Biblioteca de Carfax

Tras haber podido leer relatos suyos en algunas antologías de autoras de principios del S XX nos llega ahora un tomo completo de cuentos, con esa mezcla de gótico y toques históricos propios del momento, que ayudará a comprender cómo acabó convertida no solo en una figura del momento sino en alguien alabada como influencia por autores como Graham Greene o Fritz Leiber.

La bruja del oeste se ha muerto de Nashiki Kaho, ed. Hermida

La publicación de esta popular novela juvenil japonesa nos permite leer una historia que no es lo que parece. Porque de lo que habla es de ese periodo en el que los jóvenes no encuentran su lugar y en el que, además, los cambios se suceden. En el caso de la protagonista es la pérdida inminente de su abuela, la que le lleva a pasar con ella ese último verano en el que intentar conectar más, conocerla mejor, y aprender de ella no solo su relación con la naturaleza, también ese paso a una edad adulta.

Camelia y las Dragalácticas de Thalía Mendoza, ed. Bang

Un cómic dentro de la colección Picante de Bang que nos trae a una joven autora mexicana afincada en Barcelona para que nos cuente las aventuras de un grupo de drag queens intergalácticas comandadas por la humana Camelia. Viajes, aventuras, enfrentamientos, seres malignos y luchas para que no resurja en aquel momento del futuro el Viejo Orden Mundial Patriarcal Humanoide.

April Eye y los hermanos Manos de Diego Arboleda y Mol, ed. Anaya

Nueva serie de Diego Arboleda, esta vez con Mol ilustrando, en la que se nos presenta a April Eye (que es una especie de cíclope) y a los Hermanos Manos (que son… bueno, eso). En la Nueva York de principios del S XX. April es una periodista, los hermanos Manos son ladrones, y conviven con otras partes del cuerpo. Porque, además, están a punto de meterse en una carrera llena de problemas y humor.

Ergo de Alexis Deacon y Viviane Schawrz, ed. Birabiro

De los creadores que hace casi una década llevaron al álbum Soy Pepín Pinzón nos llega ahora algo que casi podría considerarse una precuela. Porque si aquella nos hablaba de un pollito en este Ergo tendremos a otro dentro de un huevo aún. Uno para el que todo ese huevo es su mundo, y él es ese mundo. Pero, quizá, se empiece a sentir aprisionado y considerando salir de allí.

Nos leemos.