Primero las amigas.
– Niños del desamparo de Angela Porras, ed. Foscanetworks
A veces es complicado hablar de un libro de relatos porque hay mucha variedad o porque no está muy definido, en este caso se trata más de intentar transmitir que es un libro duro pero no hostil. Es duro porque estos niños que protagonizan las historias hacen sencillo empatizar con ellos. Y es muy fácil que hayas visto, o vivido, historias como las que se cuentan. A veces más cerca de un realismo sucio rural lindante con el género criminal, otras más cerca del drama que es casi terror, o del terror que es casi drama. No hay prácticamente ambigüedad sobrenatural en ellos porque, como tantas veces, lo más terrible puede acabar siendo el ser humano y sus redes que van apretando y asfixiando. Sobre todo a los más pequeños que no entienden por qué las cosas son así, o por qué tienen que serlo. Cinco relatos, distintos y con diferentes temas y circunstancias, pero en todos ellos una verosimilitud que quizá no haga sencilla su catalogación… pero te deja el cuerpo regular.
¡Que entre la pila!
– Rey Brujo de Martha Wells, ed. Hidra
Efectivamente, vuelve Martha Wells a España. No lo hace -de momento- ni con MataBot, ni con Raksura, ni con Ile-Rien (La muerte del nigromante, vaya) aunque esperemos que si esta va bien (y está bien traducida y editada) el resto siga. Esta vez le toca a Rey Brujo, una historia de mágia y fantasía en la que un fallecido es despertado para usar su magia. El problema es que no está muy por la labor, que fue encarcelado y asesinado, y que el mundo que conoció ha cambiado. Pero… ¿cuánto podrá hacer desde el otro plano? ¿Y en quién puede confiar? Pero, sobre todo, ¿cuánto durará esa magia?
– Nowaki de Natsume Sōseki, ed. Satori
Una obra de Sōseki que habla, de nuevo, en los puntos en común y divergencias entre generaciones, con un profesor con ideas revolucionarias dado de lado por la sociedad y un joven recién graduado al que la falta de contactos le mantienen en pequeños trabajos. Ambos están lejos de poder realizar grandes obras y mantienen un pasado común que el mayor desconoce. Y, sin embargo, se encuentran ambos ante el final de una época con todo lo que eso significa para ambos.
– Linghun de Ai Jiang, ed. Dilatando Mentes
Aquí llega al fin la novela gótica de fantasmas sobre la inmigración por la que la autora Ai Jiang ea candidata al Stoker. La historia de una mudanza a un pueblo que permite contactar con los difuntos, en la que los lazos familiares y las emociones son casi tan importantes como los elementos góticos, y en los que el examen de el dolor, la muerte, la nostalgia o la inmigración hace que uno reciba un impacto distinto.
– Yo navegué con Magallanes de Stuart Dybek, ed. Pálido Fuego
El autor de La costa de Chicago trae aquí lo más cercano a una novela que llegó a escribir. Incluso si la consideráramos una unión de relatos o una novela de relatos. Una historia sobre una familia de immigrantes polacos -a partir del hijo menor- que nos presenta el Chicago de los ’50s y ’60s, con sus partes más claras y más oscuras, algunas de las cuales parecen más una historia familiar -de amigos y parientes que, a veces, no son tan cercanos aunque podrían serlo- y que llegan a parecer las anécdotas a ratos encantadoras, entrañables, nostálgicas o humorísticas que escuchas mientras vas de un lado a otro de una sala en una reunión familiar.
– La luz del norte de Hideo Yokoyama, ed. Salamandra
Nueva novela de intriga del autor de Seis Cuatro. Esta vez parece que lo han traducido del japonés y no del inglés, pero fíate de los peces de colores. En cualquier caso, es una historia particular. No una obra de Burocracia-Ficción como la anterior, sino la de un arquitecto al que dejan construir una casa impresionante, pero que años después descubre que está aparentemente vacía. Hay huellas de intrusos, pero no de la familia para la que la construyó. Así que decide ser él quien se ponga a descubrir qué se esconde tras este misterio y qué ha sido de ellos.
– Appius y Virginia de G. E. Trevelyan, ed. Tránsito
Una obra tan particular como su propia autora, la historia de una científica aficionada que decide criar a un orangután como si fuera humano, algo para lo que se aíslan de la sociedad y en la que vamos viendo cómo este experimento se enfrenta al principal problema: La capacidad para entender al otro.
– De un plumazo de Terry Pratchett, ed. Plaza & Janés
Pues sí, es cierto. Llega a España ‘esa‘ selección de relatos de Pratchett. Por supuesto no los del famoso disco duro destruido con tanta exhibición. Son obras publicadas a lo largo de los años, algunos de ellos bajo pseudónimo, que han podido seguir recuperando para su publicación porque… Bueno. Supongo que porque la explotación capitalista es así. ¿Y no va de eso la obra de Pratchett?
– Se ha horneado un crimen de John Allison y Max Sarin, ed. Fandogamia
John Allison y Max Sarin se reúnen tras el final de Giant Days para ofrecernos una historia cerrada que sirve de homenaje al Great British Bake Off. En teoría también a los misterios clásicos, pero lo cierto es que el caos poco controlado está más cerca de una especialmente accidentada screwball comedy que del murder mystery.
– ¿Quién es ese pitufo? de Tebo, ed. Norma
Puede que no sea de Peyo pero esta historia de los pitufos tiene suficiente humor en un estilo un poco diferente, lo suficiente como para demostrar lo que puede dar de si cuando se permite a otros autores contar historias haciéndolas un poco más propias, aunque solo se puedan salir del fanfic corporativo de la explotación de derechos hasta cierto punto.
Nos leemos.