Cuando comencé con estas columnas centradas en los programas de cocina manifesté mi intención por demostrar que existe televisión más allá de las series. Creo que este repaso ha servido para ilustrarlo y, de paso, enseñarnos un par de cosas o tres sobre la televisión.
Es cierto que cierro esta serie de columnas sin haber hablado —al menos no con la extensión que se merecen— de otros programas europeos, asiáticos, africanos o americanos… Una vez más mi falta de conocimientos ha sido el límite de esta sección, lamentablemente. Pero desde aquí animo a mis —teóricos— lectores a que si saben y pueden hablen sobre esos programas ignorados y nos dejen enlaces a sus post en los comments .
Creo que el movimiento principal que se ha demostrado es el de adaptación y reinvención. El paso de los programas de encimera a los de viaje, su adaptación a concursos y realities, la creación de canales específicos y su efecto en la sociedad. Aunque reconozco que en esto me he vuelto a quedar corto. El tema de la alimentación ha sido últimamente objeto de debate y batalla, no sólo en lo que ya hemos comentado, también por motivos como el uso de productos en la alimentación, el veganismo (o el vegetarianismo) y la cultura de la alimentación local frente a las grandes producciones. Temas todos ellos apasionantes pero, lamentablemente, poco frecuentados en los programas de televisión exclusivos sobre alimentación. Así que, vaya, quizá sí hay algún tema sobre el que valiera la pena montar un programa de información y debate más.
— Pero, tranquilos, sobre información os vais a aburrir de leer columnas por aquí en breve aprovechando que ayer se estrenó The Newsroom de Aaron Sorkin —
Por lo demás, quizá correspondería intentar elucubrar sobre el futuro del asunto. Lo lógico es que en estas épocas se volviera a sus orígenes, a esos programas para aprovechar las sobras y hacer raciones desde menos material —programas, por cierto, que siempre han estado ahí— y el cambio que debería producirse por las tecnologías de siempre. Bueno, y por las nuevas tecnologías que ya son como las de siempre. La posibilidad de usar los pads como libros de cocina interactivos que permitan reproducir programas a la vez y durante. Esas cosas que ya hemos visto que han empezado a pasar.
En cuanto a España, bien es cierto que quizá podría haberle dedicado algo más de espacio pero, francamente, creo que cuanto menos hable de los programas de Canal Cocina menos desolador resultará el paisaje dibujado. Me pregunto cómo irá esa idea de hacer el Top Chef España.
En cuanto a alguno de los protagonistas más destacados, ahí sí que podemos mirar qué proyectos futuros tienen:
– Gordon Ramsay, como ya dijimos, tendrá cuatro programas simultáneos este verano en la FOX, veremos si no acaba siendo él el que se quema.
– Jamie Oliver aún no se ha desesperado del todo. Vale, quizá los políticos sigan sin ser su animal favorito, pero continúa con su batalla por una buena alimentación y, de paso, parece haberse decidido a hacer otro viaje comparando la cocina de UK vs. USA, así que podríamos decir que también él va a su rollo.
– Paula Deen es otra que sigue con sus cosas. Y yo que esperaba marcar un antes y un después… ¡Recórcholis! En cualquier caso Deen también prepara algo nuevo para la tele: Food Chain, una mezcla dicen de Iron Chef y Chopped —y, por tanto, de todos sus antecesores— a partir del programa italiano Cuochi e Fiamme —lo que demuestra mi necesidad de investigar más— y, no contenta con eso, ha llegado a un acuerdo con la cadena de supermercados de Nueva York Nanco para lanzar una línea de platos preparados para ellos, infatigable sin duda.
– Anthony Bourdain, finalmente, sí ha dado un pequeño cambio de rumbo. Ha decidido terminar con su programa para el Travel Channel y pasar a otros canales, aunque insiste en que no tiene nada que ver con que el Food Network comprara ese canal —aunque habría que saber qué opina Brooke Johnson—. ¿Y a qué canal se ha ido? Pues… A la CNN . Total, nada. Prepara un programa con partes similares al suyo y otras de información o entretenimiento, una especie de magazine gastronómico. La excusa ha sido que así verá más a su familia, y podría llegar a creerlo si no fuera porque, bueno… tras destapar que haría este programa y que participará, además, como consultor para lo que la CNN decida, y que seguirá una temporada más —probablemente la última— como asesor en Treme de David Simon, lo siguiente que supimos de él es que preparaba un concurso de cocina junto a otra conocida de estas columnas Nigella Lawson, en lo que se promete como un The Voice con cuchillos y como eso era poco además presenta un comi… una novela gráfica, así que ya me contará cuándo va a ver a su familia.
Así, parece que, por lo menos de momento, no se han cortado los programas de comida. Algo esperable, al público le gustan y debería ser importante para la vocación de servicio público de algunas cadenas la necesidad de formar e informar sobre alimentación.
Poco más hay que pueda añadir. Espero, eso sí, que esto haya servido como ejemplo de la evolución y el interés que puedan tener todos los programas de la tele. Así no os asustará cuando empiece a dedicarle columnas a la carta de ajuste.