Parecía una semana tranquila pero fíjate, se han ido estrenando cosas y puede que no haya salido mucho -que menos mal- pero al menos hemos tenido variedad. En el caso de Midnight, Texas (USA) eso ha significado que la NBC vio la posibilidad de crear su propia serie de verano de Charlaine Harris y para allá que han tirado. El piloto es pura presentación incansable de personajes y misterios hasta rozar la autoparodia y nadie parece muy ocupado ni en que nos creamos algo de lo que cuentan ni de que nos importe no creérnoslo y, aunque se queda lejos del glorioso locurón y más cerca de haberlo producido con las vueltas del pan convirtiéndolo menos en una versión barata de True Blood y más en una versión barata de Witches of East End, no parece tener más pretensiones que eso. Y si vale para entretenernos un poco en verano ya es suficiente para mí.
Por contra la serie antológica Room 104 (USA) comienza con mal pie. Un primer episodio que es sin duda barato pero que dice muy poco. Se supone que van a crear narraciones a ser posible con un tono de suspense y blablabla… Pero el resultado general es pobre, la trama tiene agujeros, está muy vista y los actores tampoco parecen muy ocupados en vendérnosla. Todo esto podríamos achacarlo al problema de ponerle unas reglas a la historia centrándola en una única habitación de un hotel. Pero es que existe Inside nº 9 en esta realidad realizando una idea parecida con reglas similares y todos podemos recordar no ya capítulos más conceptuales sino, directamente, su piloto. El juego de la Lata de Sardinas que hacía que más que la habitación se pudiera hablar prácticamente de un armario. Lo bueno de que esta sea una serie antológica es que igual en próximos episodios tenemos más suerte. Pero no ha sido precisamente un buen comienzo.