Ya ha empezado el año. El motivo por el que alguien podría querer iniciarlo con Angel from Hell (USA) se escapa completamente de cualquier entendimiento posible. Maggie Lawson no se merece verse metida en estas cosas, Kevin Pollak ni siquiera debería estar cerca de tener que aceptar y Jane Lynch… bueno, ella se lo pasa en grande así que es el único motivo que se me ocurre para recomendársela a alguien. U odiar a esa persona, eso también. Todo ese ¿es un ángel que quiere lo mejor para mí o una loca que va a hundir mi vida? puede que valga para, digamos, una película navideña de Lifetime. Para una serie… ¡si casi no he soportado ni el piloto! En fin, eso, que al meno espero que les estén pagando bien.

Pasamos al inicio de la ronda de otros países, comenzando por Dinamarca con su Bedrag (O) (D), negro económico con Jeppe Gjervig Gram como uno de sus creadores, lo que sirve también para tirar de Borgen, claro. En fin, eso, un acercamiento interesante -y nórdico- al lado más ‘de despachos’ del crimen.

Aunque parezca que se han puesto de acuerdo, son series muy distintas esa de Bedrag y esta de Billions (USA), aunque sea solo porque esta es más macho bravado con el protagonismo centrado en Paul Giamatti y Damian Lewis. Lamentablemente la desigualdad entre ambos actores o, siendo más justos, entre el interés que demuestran por su trabajo se ve además multiplicado por sus parejas en televisión, Maggie Siff y Malin Åkerman respectivamente. No solo Lewis se come la función, además logra funcionar con Siff y volar por los aires con Åkerman. También ayuda que está en el papel de malvado -de nuevo- y pudiendo lucir todo su carisma, mientras que Giamatti parece estar atrapado en una parodia del SNL. Bueno, otra vez será.

La FOX ha estrenado Bordertown (USA), una serie animada cómica sobre la vida en la frontera entre USA y México, algo que está claro que necesita de un gran programa capaz de reflejar los distintos puntos de vista satirizando tanta tontería y tantos intereses contrapuestos en unos momentos como estos en el que la inmigración es un gran tema de discusión entre los norteamericanos de uno y otro lado. En lugar de eso tenemos una serie producida por Seth MacFarlane que logra ser incluso peor que sus anteriores series. Ay.

Seguimos con nuestro paseo internacional de inicio de año con la galesa Byw Celwydd (O) (Gales) que intenta acercarse desde sus propias posicioneas al drama político, digamos que toma cosas de la larga tradición de política ficción inglesa y la mezcla con, de nuevo, Borgen. Debe ser cosa del invierno. El resultado, por cierto, es bueno. Consistente incluso. Un poco… falto de originalidad, por así decirlo. Pero ese es un problema menor aquí.

Por contra Degrassi: Next Class (CA) es Degrassi as usual. El cambio de cadena -en Canadá se han ido a Family y para el resto del mundo tiran de Netflix– ha supuesto básicamente… nada. Se han quitado de en medio a los personajes de las temporadas más antiguas de la anterior encarnación. Pero han dejado a los de las cuatro más recientes. Así que eso, si has visto Degrassi alguna vez -y son ya 37 años de franquicia, así que asumiré que sí- sabes lo que encontrarás.

De web series a probar a ver si cuela, Idiotsitter (USA) es la siguiente de la tendencia. Con el resultado habitual. Si así vamos no quiero ni pensar en lo que suceda cuando comiencen a adaptar fanfics.

No, Jericho (UK) no tiene nada que ver con la serie postapocalíptica de 2006, ni con la policíaca de 2005, ni siquiera con la de espionaje en la 2ªGM de 1966. Sí, es un nombre popular. Aquí toca una serie histórica centrada en el último tercio del S XIX en un pueblecito en el que van a construir un viaducto. Imagino que gustará si te va este rollo.

Terminamos nuestro repaso por los otros países con Rebellion (O) (Irlanda) que es un drama histórico sobre su pasado, concretamente sobre la rebelión de 1916. Bien narrado, bien preparado y -sospecho- muy pensado. Se ve que es el momento de sacar este tipo de series.

Por extraño que parezca Shades of blue (USA) ni siquiera es una mala serie. Es decir, un policíaco centrado en los bajos fondos y la corrupción del departamento de policía con toques de thriller sexy y Jennifer López como principal reclamo, si eso no era un reclamo para el desastre total no sé qué podía serlo. Lamentablemente ni siquiera ha logrado eso, con lo que, paradójicamente, es algo incluso peor: es una serie media. La trama y los personajes son los esperables, y del mismo modo que no hay nada destacable para mal tampoco lo hay para bien. Con lo que acaba siento tan entretenido como masticar relleno de cojines..

Vamos con The Shannara Chronicles (USA), que tiene en su contra el lío que han montado ellos solitos y a su favor enormes cantidades de dinero. En serio, es uno de esos ejemplos de Mira la de pasta que nos hemos gastado que sirve para tenernos entretenidos un rato pero que al final no separa la sensación de estar viendo una historia de fantasía épica tirando a genérica, casi como si alguien hubiera gastado sus ahorros en adaptar su mejor campaña de D&D. En lugar de hacer lo lógico y adaptar la de La llamada de Chtulhu. Pero, a lo que iba, adapta una serie de libros, la Saga de Shannara de Terry Brooks, como podría haber adaptado La Dragonlance, Añoranzas y Pesares o la Saga de Lankhmar. Por supuesto intenta remitir a El Señor de los Anillos tanto como a Juego de Tronos, aquí van a lo que pillen, y si bien no llega al desastre total de La Rueda del Tiempo, y dudo que sea capaz de lanzar una serie de exploits a su paso -así que tendréis que seguir esperando vuestra adaptación de Prydain– estoy seguro de que hará muy felices a los fanes del género. ¿AL resto? Pues depende. Los libros son suficiente libro como para que este acercamiento -a parttir de uno que no es el primero y buscando mezclar partes diferentes de varios de ellos- pueda interesar mucho más allá. Salvo que logren colar esas referencias a las películas adaptando novelas juveniles distópicas recientes. Pero, vaya, que la MTv ha puesto mucho dinero en esto como para que no vayamos a encontrárnosla por todas partes.

Quizá hayas oído hablar de esta novela, War and Peace (UK), el caso es que en la BBC han decidido que volvía a tocar adaptación – la anterior era una francogermanoitaliana de 2007 – y lo han hecho a su estilo: Una producción acongojante,que quizá queda algo perdida con sus actores principales, un Paul Dano que es lo más ingleses que se puede ser adaptando a Tolstoi y James Norton parece estar siempre en otra obra, eso cuando no parece estar celebrando los goles de su equipo o algo así -y creo que jamás pensé que escribiría pero…  su pelo tampoco ayuda, la verdad- a lo que podemos añadir que los personajes centrales parecen al menos diez años más jóvenes de lo esperable dándole a todo un extraño aspecto de The CW War & Peace. Pero, vaya, el texto sigue siendo el mismo y la producción, oh, la producción. No creo que sea superable. En al menos otros diez años.