Hay semanas en las que uno no sabe lo que pensar, pero, mira, mejor pinta que Yankee sí que tiene esta Bonding (USA). Lo que pasa luego es que el nivel es el justo, las tramas acaban siendo repetitivas y -como pasa últimamente en el servicio- hay más intención de epatar y de fingirse adulto que movimientos en esa dirección. De hecho, podría haber sido una película perfectamente, porque el que sea una serie, sobre todo con ese último capítulo, no dice demasiado a su favor.

De todas formas, la peor serie de la semana y una de las peores recientes de nuestro servicio de streaming más conocido -y mira que había candidatas- es esta Chambers (USA) que une una trama de trasplantes tan lamentable que haría sonrojar a Mariló Montero, una serie de sustos que entrarían en lo más vergonzoso de la Blumhouse si allí alguno tuviera vergüenza y una trama común que de verdad me sorprende que alguien aceptara en algún momento. El que tenga nombres medianamente conocidos esto sólo lo hace más triste, aunque nos quede al menos la satisfacción de saber que al menos comerán caliente.

Como se nota cuando la BBC entra en coalición con el mercado americano, por ejemplo en Gentleman Jack (USA) ofrece toda su sabiduría en reconstrucción histórica y sus maravillosos recursos para la producción o los actores. Especialmente magnífica está Suranne Jones como su personaje central. Y especialmente interesante es la forma en la que cuentan la historia, hablando de esta mujer valiente que rompía moldes pero, a la vez, mostrando su situación de privilegio dentro de un sistema incluso más podrido -o, al menos, podrido de una manera distinta- del actual. Una gran obra.

Estoy muy contento con Queens of Mystery (UK) porque es el tipo de murder mystery con ribetes de cozy que parece pensado para que yo pase una tarde entretenida. Una chica regresa a su pueblo para ejercer de policía, allí viven sus tres tías y existe un misterio sobre su madre, pero lo importante es que las tres tías son distintos tipos de escritoras de misterio, y una de ellas tiene incluso una librería especializada. Sí, casi podría ser una serie de películas de Hallmark, pero en lugar de eso es de Acorn TV, importadores de series de UK que han decidido crear esta cuyo mayor problema me parece -más allá de lo que opinemos de obras como, digamos, Agatha Raisin– la decisión de que cada historia se cuente en dos capítulos. Lo que hace que sean tres las historias en los seis capítulos. En fin, los ingleses y sus extrañas maneras de establecer capítulos y duraciones. En cualquier caso, espero nuevas temporadas.

Ha sido una más que agradable sorpresa encontrarse con I Think You Should Leave With Tim Robinson (USA), un programa de sketches cómicos en el que Robinson sabe ceder el espacio central -y lateral- y ofrecer lo que debería haber estado haciendo el SNL los últimos años. Por supuesto la duda de por qué han acabo aquí en lugar de allí teniendo en cuenta que hablamos de Robinson y de The Lonely Island como productores es… en fin, un poco ridículo. El ascenso de Nicole Byer ha seguido un camino similar y ha acabado beneficiando también a Netflix sobre todo. En cualquier caso, y por mucho que en ocasiones se le note esa alternativa generalista frente al buen trabajo hace unos años de las series de sketches más diversas, estamos ante lo que tendría que hacerse en un programa de estas características. Esperemos que tomen nota todos los implicados.