El Musical: Curtains

Si llegáis despistados sin saber de qué estoy hablando quizá penséis que el clásico slasher canadiense tuvo una versión en musical. Y no. De momento. Yo no pierdo la esperanza.

Pero no, es un musical de 2006 cuyo argumento solo puedo calificar de retorcido y tumultuoso, porque el armazón principal es un Whodunnit, un asesinato al estilo clásico -está ambientado en 1959- cuya resolución ocupará la obra. Pensad en Se ha escrito un crimen: El musical. Que no existe aún, y tampoco entiendo por qué.

Sobre ese armazón va una historia de amor por el negocio del espectáculo. Porque el asesinato ocurre en un teatro. En un teatro musical, concretamente. Que está preparando el estreno de Robbin’ Hood of the Old West que, efectivamente, es un musical adaptando a Robin Hood al Oeste. Dentro del tropo Obra-sin-obra veremos algunas escenas pero será lo que pasa detrás del escenario lo que importe realmente.

Por si esta acumulación de misterios, canciones, tramoyas y meta no fuera suficiente el encargado de dar por vez primera vida al personaje principal, el Teniente Frank Cioffi, un poli muy aficionado a los musicales, fue nada menos que David Hyde Pierce que había cerrado Frasier en 2004.

Puestos a ello podían haberlo hecho sobre esta misma obra, al fin y al cabo su parto fue complicado por la muerte de un par de responsables antes de llegar a los escenarios, provocando una serie de cambios y problemas que hacen resentirse a la obra. Pero no nos centremos en ellos.

Lamentablemente la calidad de las grabaciones no está a la altura de la intepretación o de la obra, pero como pasa siempre con los bootlegs, al menos esto nos ha permitido conservar para la posteridad. Así que no os os entretengo más: