Uno de los trucos más antiguos de los productores baratos, algo que a estas alturas aún se sigue usando. El Ahorro Telefónico es ese momento en que para hacer avanzar la trama se usa un teléfono para hacer llegar información al espectador. En lugar de organizar una escena o buscar una manera más elaborada de facilitar esa información habrá un intercambio. Que generalmente se organizará de una de estas maneras:
– El Teléfono como Pared.
Posiblemente el más viejo y, a la vez, el más ridículo de todos. Un autor tiene que comunicar al público cierta información, de manera que uno de sus personajes descolgará el teléfono y empezará a relatar información teóricamente a su interlocutor pero en realidad a los espectadores. Solo ligeramente mejor que decirla en voz alto sin motivo alguno.
«Williams, ¿está usted ahí? Sepa que lo asesinatos han vuelto a empezar en el Hospital Johnson, de nuevo en luna llena como las tres veces anteriores. Y, además, parece que el joven de los Aberddyne ha estado por aquí husmeando, no ha debido de olvidar la muerte de su novia o que el Abogado Leeds esté ahora al cargo de las posesiones de la familia. Sí, Williams, es un caso complicado.»
– El Personaje como Pared.
Hay una variedad incluso más ridícula, por difícil que sea de creer -Y que sí tiene Tropo en TVTropes, pero vamos a incluirlo igual para tenerlo todo juntito-. Aquella en la que el personaje que está realizando la llamada comienza a repetir en alto lo que le están contando, ejerciendo de algo así como de Pared Hablante. Pocas cosas más ridículas se pueden ver en una obra.
«Sí, dígame, Williams. ¿Qué? ¿Que la tía de la bella señorita Lerry ha sido encontrada amordazada en la cocina? ¿Y que han revuelto todos sus papeles? ¿Cómo que parece que alguien ha robado una foto? ¿El sospechosos iba envuelto en una capa negra y por eso la criada no le ha visto cuando ha escapado? Demonios, Williams, este caso se complica por momentos.»
– Me acaban de comunicar.
La manera más sencilla de ahorrar tiempo y hacer avanzar la trama es, directamente, colocar la llamada en elíptico. Generalmente aparecerá un personaje colgando el teléfono -ahora con los móviles muchos los estarán colgando A LA VEZ que comienzan a hablar- para comunicar a otros personajes que acaba de recibir una información que pasa a relatarles. Un recurso sencillo y cotidiano que puede pasar incluso desapercibido.
*clic* «Señores, malas noticias, Williams me acaba de comunicar que el criminal fugado del psiquiátrico al que detuvimos estuvo ayer asaltando una licorería a la hora de los hechos. Tenemos que seguir buscando a nuestro culpable.»
– La Llamada de Resolver Agendas.
Hay una versión especialmente divertida de este no-lo-llamaré-Tropo que es cuando dos personajes tienen que tener una conversación en la que ambos deben participar pero por lo que sea no van a molestarse en cuadrar las agendas, quizá uno de ellos sea solo un secundario o un invitado al que hay que aprovechar en un corto espacio de tiempo. El resultado puede acaba siendo con cierta facilidad que esa conversación la tengan por teléfono, bien con pantalla partida bien turnándose.
«¿Williams, alguna novedad?»
«Parece que el Doctor Johnson ha comprado una gran cantidad de material, en el banco nos han confirmado que tiene problemas.»
«Espero que hayan revisado bien todos esos datos, necesito saber cuanto antes hasta dónde se extiende el asunto.»
«Nuestro equipo está investigando y parece que pronto podremos decirle de dónde sale el dinero.»
«En cuanto sepa cualquier cosa llámeme, ¡sin dudar!».
– El Método Livingstone
Aprovecho para realizar una mención de honor en este último tropo para Joe Livingstone (Godfrey Ho) que no tuvo reparos en usar llamadas telefónicas para conectar entre sí el metraje de las pelis que compraba o algún inserto de material nuevo rodado. Y de ahí cosas como la magnífica Trilogía Vampírica de Robo Vampire, El diablo de la dinamita y Contraespionaje en la selva. Para que luego digan que no se puede crear algo nuevo desde algo existente aplicando los tropos.
«Williams, deprisa, mande refuerzos, parece que ya lo tenemos.»
«¡¡¡Un malvado monstruo gigante ha salido de las alcantarillas!!! ¡¡¡Va a devorarnos a todos!!! ¡Sin duda es el producto de los impíos experimentos del [Doctor Johnson]!»
«Creo que esta vez le atraparemos, pero necesitamos toda su ayuda.»
«Hemos mandado a todos los chicos a combatirlos, que Dios se apiade de su alma.»
«En cuanto puedan que vengan. Mientras tanto nosotros iremos dándole caza. ¡Esta misma noche acabarán nuestros problemas!.»