Incluso en las semanas más flojas -de calidad- hay picos de calidad. Este semana todo se me pasa, más o menos, gracias a 7 days in hell (USA). Especial a mayor gloria de Andy Samberg -aunque no sea propiamente dicho el protagonista- que la HBO autorizó a saber si para mover Wimbledon o para qué. El caso es que su creador, Murray Miller, uno de los escritores de Girls y también productor, puso en marcha a toda una notable cantidad de talento a ambos lados de la pantalla para lo que podría ser un sketch bastante extremo. El resumen es una locura que a ratos recuerda la brillantez de los Monty Python para la sátira y la locura mientras que en otros nos recuerda que es la HBO y no tienen necesidad de cortarse en lo sexual. Ojalá más pequeñas piezas como esta.
Esto compensa cosas como el último resultado de los
Commedy Feeds de la
BBC, que no puede ser peor porque ya el año pasado tocaron suelo, que si no… En fin. La primera de las seis propuestas que sacan a ver si le dan series completas este año es
Dead air (UK) que trata de aprovechar a un tipo con éxito en la radio de allá,
Greg James, para ponerle en un ambiente de
sitcom clásica. Tanto que casi ni parece que se esfuercen: Nuestro héroe, en un pequeño puesto, tiene la posibilidad de llegar a un programa mayor pero, claro, eso significaría blablalba y su jefe es un blablalbla, y el colega exitoso, la chica, el amigo idiota… ¿Para qué querría la
BBC aprobar algo que sin duda cancelaron hace años?
Si creías que la anterior era mala espera a encontrare con esta historia familiar de una chica que tras múltiples problemas deja la universidad y vuelve a casa con sus padres, lo llaman
Fishbowl (UK) porque
el cuenco del perro hubiera sido demasiado descriptivo. Ni los esfuerzos finales del capítulo lograrían que viera el siguiente.
Cuando el año pasado
Funz & Gamez (UK) recibió un premio en el Festival de Edinburgo sospeché que algo se me escapaba. Ahora que lo veo convertido en piloto y con la más que probable posibilidad de ser convertido en series solo puedo decir que algo me he perdido por el camino. Supongo que esta forma de tomar los concursos tradicionales tiene algo de gracioso que solo puedo achacar a un condicionamiento cultural del que yo carezco. Mogollón. Porque me resulta insoportable.
¿Alguna vez te has preguntado si
TVLand podría montar su propia versión de Serie B de
Louie? ¡Enhorabuena, aquí llegó
The Jim Gaffigan Show (USA)! Un cómico de
stand up con muchos amigos famosos que van haciendo cameos mientras él cuenta su vida como casado con muchos hijos y pocas ganas de atenderlos. ¡Quizá hasta puedas entender qué era lo que hacía tan grande a
Louie en esas primeras temporadas! Si el canal no lo ha hecho lo mismo los espectadores sí puedan sacar alguna lección.
Como la
BBC no solo hace pilotos de mie…ntras terminan de recortarles los fondos también nos hemos podido ver
The Outcast (UK), adaptación del mismo libro de
Sadie Jones que sigue la madurez de un joven en la mísera Inglaterra de postguerra y que es ideal si quieres deprimirte un buen rato mientras en la pantalla los de imagen y sonido hacen todo lo que pueden por buscar aquello del aliento poético. Particularmente no me atraen nada este tipo de historias así que paso mucho, pero sospecho que si alguien quiere deprimirse bellamente es su oportunidad perfecta de hacerlo este verano.
En cuanto a
Paris (O) (F) y pese a las muchas obras con el mismo nombre, lo que tenemos aquí es una mini para
ARTE creada por
Virginie Brac y
Gilles Bannier que ya colaboraron en
Engrenages, de modo que ya sabéis lo que os podéis encontrar. Una historia de personajes con trasfondo criminal que, en este caso, une desde el primer ministro a una cantante transexual de cabaret. No está mal, vaya.
Esta serie de
sketches llamada
People time (UK) que debería funcionar aunque solo fuera porque en teoría reúne a siete jóvenes cómicos y les da hueco para que recuperen la brillantez de los programas de
sketches que un día hicieron grande a su país, o está muy verde o es poco probable que encuentren un centro en el que fijarse, desde luego está muy lejos de otros intentos que hemos visto este año, incluso siendo consciente de que en este tipo de programas raro es que el piloto diga gran cosa. En fin, si hay suerte.
En cuanto a
Radges (UK), se ve que hacía falta también una comedia de jóvenes descontrolados. En realidad hay gente más o menos conocida como
Sarah Hadland que, bueno, sale en el programa y eso porque lo que se ve es lo que hay. Otro pequeño desastre.
Queda la duda con
Sex&Drugs&Rock&Roll (USA) de qué era lo que buscaba
Denis Leary, ¿mostrar la decadencia del personaje o la suya propia? Bien es cierto que de viejos rockeros ha estado llena la televisión, incluidos los canales infantiles, pero esto que su propia cadena parecía vendernos como una versión musical de
Californication no solo no lo es, y casi diría que lo agradezco, sino que carece de cualquier excentricidad o dureza de las que
Rescue Me pudiera haber hecho gala. De manera que si hubiera que compararlo a una serie sería a…
Ruby & The Rockits. Para esto has quedado,
Leary, y ni siquiera tienes la mitad de magnífica biografía de los
Cassidy.
Terminamos el repaso a esta semana y al Comedy Feed de la BBC, las dos a la vez, con
Sunny D (UK) a mayor gloria de
Dane Baptiste que parece más convencido de su propia brillantez que de cualquier otra cosa, quizá por ello no deje de sonarnos todo a conocido ni ser poco menos que los exteriores de un acto de stan-up, en el que todo está ahí como fondo para el personaje central. Urgh.
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