Bueno, pues no sé si acabaréis de descubrir estas cosas o si seréis de los que lleváis años leyendo esto. Lo importante es que estáis aquí, que -supongo que para sorpresa de muchos incluida la mía, porque vaya puta mierda de año este también y qué poco se merece el mundillo pero sobre todo sus integrantes cualquier palabra, ojalá para el próximo ya no esté escribiendo esto- yo también lo estoy y que ahora toca toda esa pila de texto sobre la cosa de los libros de este año.
Pero vamos con el texto de siempre:
Un año más (¡más de 20 años ya, qué barbaridad, cómo pasa el tiempo! y parecía que fue ayer cuando empezamos con la tontería) aprovecho el comienzo de año para entregar el “Sark de Oro” al libro que más me ha gustado del año recién concluido
Comienzo con la clásica advertencia así que quien quiera pasar al resumen del año que se salte este párrafo. Las listas de “Lo mejor de…” acaban siendo los resultados de la intersección de los gustos personales con los libros leídos a lo largo del año. La posibilidad de que haya aparecido un libro revelador y no salga en esta lista puede deberse más a no haberlo leído que a criterios de selección. Recapitulando en estos años y para que quede constancia, los anteriores Sark de Oro recayeron en “El Hada Carabina” de Daniel Pennac, “Huérfanos de Brooklyn” de Jonathan Lethem, “Cíclopes” de David Sedaris,“La Disco Rusa” de Wladimir Kaminer, “La Mosca” de Slawomir Mrozek, “El Martillo Cósmico” de Robert Antón Wilson , “Pégate un tiro para sobrevivir” de Chuck Klosterman, “Las Ovejas de Glenkill” de Leonie Swann, los “Cuentos Completos” de Connie Willis, “Al pie de la escalera” de Lorrie Moore, “Mi Tío Napoleón” de Iraj Pezeshkzad, “Los amigos de Eddie Coyle” de George V. Higgins, “Hermana mía, mi amor” de Joyce Carol Oates, “Boston. Sonata para violín sin cuerdas” de Todd McEwen, “Americanah” de Chimamanda Ngozi Adichie, “La hoguera pública” de Robert Coover, “Descolonizar la mente” de Ngũgĩ wa Thiong’o, “Las Mitford” de Charlotte Mosley, «Experimental film» de Gemma Files, «Bienvenidos a Dietland» de Sarai Walker, «En un lugar solitario» de Dorothy B. Hughes., «Calypso» de David Sedaris, «Desaparición para expertos» de Holly Jackson y «Trilogía Illuminatus!» de Robert Anton Wilson y Robert Shea.
Al final tendré que crear una wiki o un algo para que entren todos. Sin contar con que debería empezar a pensar en poner también los Sark de Plata y las otras dos categorías inventadas, el premio a No-Ficción Sark de No-Oro y el premio a libro en lengua inglesa Golden Sark. Porque esto cada vez queda más largo.
Aviso, también como casi todos los años, de que mis lecturas suelen determinarse por autores y escuderías, es más sencillo que lea algo de las editoriales pequeñas y medianas a que lo haga con lo que sacan Planeta, Alfaguara o Anagrama. Vamos, que no pretendo engañar a nadie: No me he leído todo lo publicado ni de lejos. Dicho lo cuál y antes de entrar en los ganadores de este año vamos a repasar lo que han hecho los editores.
En cuanto a los libros…
Tras estos últimos años el de 2023 ha sido un año de reconstrucción. Puede que no estar en una librería -de momento, tengo los DMs abiertos- hubiera debido darme una nueva perspectiva. En realidad lo que más ha servido ha sido esa separación. Cuanto menos se tiene que ver con Lo de los Libros, mejor. Tantos movimientos desesperados para trepar y darse bombo, tanto mentir para conseguir migajas, tanto… Mejor lejos. Y seguir defendiendo a los lectores y a los libros. Porque, como habréis visto, siguen los Libros que Salen, y me he rendido a la evidencia de que la gente quiere leerse unos Recomendados cada cierto tiempo. En ellos está el mejor resumen posible que hacer de este año.
Desde la gran variedad en narrativa (con títulos destacados como Mala onda, Tu nombre o Amarilla) al gran momento del criminal sección Murder Mystery (como El Asesinato de Santa Claus o Asesinato en el Richelieu) a versiones ligeras modernas (ahí están Finlay Donovan o The Naturals) y la mucha variedad que hay, a como en el fantástico la ciencia ficción anda un poco perdida pero la fantasía va bien (en un año que nos ha traído tres libros de Ursula Vernon / T. Kingfisher, incluyendo su recién ganado Hugo) así como nombres conocidos y nombres inesperados y el terror va viento en popa (pensemos en Nuestras esposas bajo el mar, Mi corazón es una motosierra, Un payaso en el maizal o Muertos de segunda), variedad dentro de la no ficción (en la parte cultural, pero también en la histórica o deportiva, además de en la biográfica), un magnífico reparto en cómic (con títulos como Cosmoknights, la publicación finalmente de Mermaid Saga y la recuperación del western o el policíaco clásico o moderno), y un panorama en infantil y juvenil de lo más variado en el que entran desde los álbumes ilustrados a novelas (ahí está Tres golpes de suerte, por ejemplo). Cabe un poco de todo en los libros, caben libros ilustrados y ediciones distintas, libros de cocina y toda la variedad que se nos pueda ocurrir. Precisamente por eso cuando me pidieron que indicara de alguna manera el contenido queer pensé que tocaba tener su hueco entre los destacados de este año -quién sabe si habrá llegado para quedarse-. Porque, al final, todos son libros que merecen un empujón más para tener alguna oportunidad dentro de la enormísima cantidad que sale cada año. Y de los que tanto los Recomendados como los LqS semanales no son más que una pequeña selección siguiendo mis gustos y opiniones.
Así que ya está bien de tanto título y tanta cosa, ¡que tampoco habéis venido para que os aburra durante todo el día! Así que pasemos a lo que os interesa de verdad. ¡Los Sark de Oro! Y los ganadores son…